Las tristezas de hoy no son Nada comparadas con las alegrías de mañana
Porque considero que los padecimientos del tiempo presente no son dignos de comparar con la gloria que pronto nos ha de ser revelada. Y sabemos que Dios hace que todas las cosas ayuden para bien a los que le aman, esto es, a los que son llamados conforme a su propósito. ¿Qué, pues, diremos frente a estas cosas? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? . Por lo cual estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo porvenir, ni poderes, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro.
Obviamente estas no son mis palabras. Las dijo alguien infinitamente más poderoso que yo.
Si yo nunca hubiese escuchado estas palabras, me habría suicidado hace muchísimo tiempo.
Obviamente estas no son mis palabras. Las dijo alguien infinitamente más poderoso que yo.
Si yo nunca hubiese escuchado estas palabras, me habría suicidado hace muchísimo tiempo.
1 comentario
quim -
"En todo tiempo ama el amigo y es como hermano en tiempo de angustia".
Por cierto de donde sales?
Besos y escríbeme
Quim (y Alex)